Blogia
wacomole

Vivir en la ciudad más fea del mundo

Vivo en la ciudad más fea del mundo. Es como un descomunal bloque de hormigón estampado en medio de la nada.
No se en que coño pensarían los romanos cuando decidieron ubicar su ciudad en un paisaje tan poco amable, supongo que lo harían por el río. Lo del rió es caso aparte, la gente se siente orgullosa de su río. ¿cómo cojones alguien se puede sentir orgulloso de un río? Te puedes sentir orgulloso de muchas cosas pero no de un puto río. A ver si la gente se entera de que al puñetero río se la traen floja sus orgullos y tened en cuenta que, si algún día hay riada no se va a parar a consultar la lista de tipos orgullosos de él, si os tiene que engullir, fastidiar la casa, el coche o la puta madre que os parió lo hará y punto, porque es un río y no Einstein.

También tiene guasa que critiques la ciudad y la peña te venga con el cuento de que “es una ciudad milenaria”. La mierda también es milenaria y a nadie le gusta. ¿o no?.
O también te sueltan el rollo de “...pero tienes cantidad de centros comerciales”. Hombre, en eso llevan razón, pero yo me atrevería a completar tan erudita frase diciendo “hay cantidad de centros comerciales repletos de cantidad de paletos de mierda”. Pienso que las verdades a medias son basura, por eso, o lo dices todo o no digas nada.

Pero no sólo la ciudad es fea por fuera, también lo es por dentro. Es decir, hay una apestosa conciencia provinciana con cierto tufillo a extremo conservadurismo que impide que las iniciativas culturales, que van más allá del baile regional, los toros, la repostería tradicional, el encaje de bolillos y la elaboración de gaitas, fructifiquen.
Esto se podría achacar al escasísimo nivel de participación de los estamentos oficiales en eventos fuera de la castañuela y la bandurria, pero en realidad una exagerada mayoría de los habitantes de mi ciudad pasan olímpicamente de conciertos, teatro, presentaciones de libros, exposiciones, etc. Pero eso sí, cuando hay bocatas de longaniza o roscones gigantes gratis en la plaza del ayuntamiento allá que van todos a ver si pueden llenarse la barriga por la jerol, Así que ya se sabe, si alguien quiere ser alcalde de mi ciudad, que prohíba la lectura y ponga a todo el personal ciego de grasas saturadas. El éxito está garantizado.

0 comentarios